13 abril 2008

Jueces a dedo (un atajo)


Dicen, y es broma pesada, que después del fiasco de McLaren en el Gran premio de Brasil, se ha decidido hacer pilotos de fórmula 1 a los mejores de cada promoción de autoescuela, de modo que los que tengan menos fallos en los test y realicen mejor faena en el examen práctico pasen directamente a los circuitos.
Semejante chorrada, por supuesto, no pude producir más que carcajadas y algún que otro abucheo por contra chistes tan malos. Sin embargo, todo un ministro de justicia dice lo mismo de los jueces y la gente se queda tan ancha.
¿Pero qué tontería es esa de que los mejores estudiantes de cada promoción podrán ser jueces sin necesidad de opositar? ¿No hace falta un temple, un carácter y un conocimiento superior para ser juez?
No sé a ustedes, pero a mí, la verdad, me suena a mamoneo por todo lo alto. Me suena a dar a los profesores de Universidad la capacidad de entregar puestos bien pagados y de por vida. Me suena restaurar la vieja época del enchufismo, pero donde antes un jamón te daba un aprobado ahora te da un sueldo perpetuo. Me suena a gran desastre.
Porque las universidades, por supuesto, competirán a la hora de inflar sus notas, para que sean los suyos, y no los de al lado, los que llegan a los asientos de la judicatura. Porque donde antes se debía un favor a un miembro de un tribunal de oposiciones ahora se deberá a cincuenta profesores que has tenido en la carrera y que te han ayudado a ganar esas décimas que te colocaron.
La Universidad, señores, es el peor antro, la peor cloaca de arbitrariedad y endogamia de España, y de ahí se supone que tienen que salir los jueces imparciales y diligentes del futuro, sin otra prueba que los propios filtros de semejante lupanar.
¿Que exagero? Más quisiera yo.
Para ser profesor de primaria, o de instituto, hay que sacar una oposición a la que se presentan trescientos o cuatrocientos por cada plaza. Para ser profesor universitario, no. ¿A que no lo sabían?
Pues pregunten, y si conocen a algún catedrático o a algún profesor de universidad, pregúntenle cuántos más se presentaron el día que sacaron la plaza. Uno o ninguno. La media es esa, más o menos. ¿Y por qué no se presenta nadie? Respóndanse ustedes.
La Universidad es un lugar donde se medra haciendo amigos, dando las clases del que debería darlas y corrigiendo los exámenes que no quiere corregir el que ya es funcionario. Si eres dócil, "te sacan" la plaza, y te hacen funcionario a ti; y si no, se te acaba el contrato y te marchas.
¿Y de ahí, sin más prueba posterior, quieren que salgan los jueces? Será un atajo, supongo: hasta ahora, los jueces, se van maleando y corrompiendo con el tiempo, poco a poco. A partir de esto, ya vendrán corrompidos de inicio.
Todo sea por abreviar.

6 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo, Javier.

    Lo siguiente es montar un reality, por ejemplo "Gran magistrado", donde se elija al juez por SMS:

    Si quieres que sea elegida Tamara, envia "JUEZ SEISDEDOS" AL 6969, si, por el contrario, prefieres a Pocholo...

    Saludos

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  2. Se me olvidó comentar que con el pastón que se saque de los SMS's se pueden financiar los juzgados, que dicen que están en la indigencia.

    Saludos de nuevo.

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  3. Edso en cierto modo es la lye esa del jurado, me temo.

    Que te juzgue un jurado creo que es como que te juzguen pro sorteo. Como hayas salido en la porensa o se te acuse de algo feo, vas dado...

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  4. Buena idea lo dle pastónd el SMS...

    A lo mejor así...

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  5. Anónimo1:44 p. m.

    Oye, me gustan tus articulos.
    gracias

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  6. GRACIAS ANÓNIMO,

    DA GUSTO, COÑE

    :-)

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